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● DRAGÓN o SALAMANQUESA COMÚN (Tarentola mauritanica)



Filo: Chordata
Clase: Sauropsida
Orden: Squamata
Suborden: Gekkota
Familia: Phyllodactylidae
Género: Tarentola
Especie: Tarentola mauritanica

El Dragón (salamanquesa) común es nativo del Mediterráneo Occidental, sin embargo, debido a su interesante morfología y su habilidad para adaptarse a diferentes condiciones climáticas y geográficas, se ha extendido por todo el mundo.

En la Península Ibérica, Italia y muchos otros países, el Tarentola mauritanica es un residente habitual. En España, las poblaciones más grandes se encuentran en el centro, este y sur de la península. Aunque se puede encontrar en casi cualquier lugar de la península, su presencia es particularmente destacada en las Islas Baleares, incluyendo Ibiza.

El Dragón (salamanquesa) común es un reptil de tamaño pequeño, generalmente mide entre 80 mm y 90 mm de longitud, aunque puede llegar a los 190 mm si se incluye la cola. Su cuerpo, cabeza y cola están “aplanados”, lo que les permite deslizarse fácilmente y acceder a espacios estrechos que serían inaccesibles para otros animales. Además, tiene la capacidad de regenerar su cola si se cae por alguna razón.

A pesar de su apariencia amenazante, el Dragón (salamanquesa) común es completamente inofensivo. Algunas personas se preguntan si la salamanquesa es venenosa. La respuesta es no, es un animal completamente inofensivo.

El Tarentola mauritanica es un perfecto ejemplo de cómo una especie puede adaptarse y prosperar en una variedad de entornos. Su presencia en Ibiza y en otras partes del mundo es un testimonio de su resistencia y adaptabilidad. Aunque es un animal pequeño, su impacto en los ecosistemas es significativo. Como todos los reptiles, juega un papel crucial en el equilibrio de los ecosistemas, contribuyendo a controlar las poblaciones de insectos y otros pequeños invertebrados.

● DRAGÓN o SALAMANQUESA ROSADO/A (Hemidactylus turcicus)

Filo: Chordata
Clase: Sauropsida
Orden: Squamata
Suborden: Lacertilia
Familia: Gekkonidae
Género: Hemidactylus
Especie: Hemidactylus turcicus



Conocido también como el Gecko turco, el Dragón (salamanquesa) Rosado ha logrado adaptarse con éxito al clima mediterráneo de Ibiza. Su presencia en la isla ha sido registrada desde hace varios años y se ha convertido en una especie común en la zona. Aunque su nombre sugiere un colorido distintivo, su tonalidad puede variar entre diferentes tonos de rosa, marrón o gris, lo que le permite camuflarse hábilmente en su entorno.

Este pequeño reptil puede crecer hasta alcanzar una longitud de aproximadamente 15 centímetros, y se caracteriza por su cuerpo delgado y sus patas largas y ágiles. Su cola es regenerativa, lo que significa que puede desprenderse de ella como mecanismo de defensa y volver a crecer posteriormente.

El Dragón Rosado es una especie nocturna y se alimenta principalmente de insectos, arañas y otros pequeños invertebrados. Durante el día, se refugia en grietas de paredes, rocas y estructuras humanas, aprovechando su habilidad para trepar y adherirse a superficies verticales gracias a sus almohadillas adhesivas en sus dedos.

La presencia de este lagarto en Ibiza ha sido beneficiosa para el ecosistema local. Al alimentarse de insectos, contribuye al control natural de plagas, lo que ayuda a mantener un equilibrio en la fauna y flora de la isla. Además, su presencia añade una belleza única a los paisajes de Ibiza, especialmente cuando se les observa trepando por las paredes de las casas blancas típicas de la isla.

Aunque el Dragón Rosado es una especie común en Ibiza, es importante respetar su hábitat y no interferir con su vida diaria. Evitar la caza o la captura de estos lagartos, así como garantizar la conservación de su entorno natural, es esencial para preservar la biodiversidad de la isla.

La presencia del Dragón Rosado añade un toque de color y diversidad a los paisajes mediterráneos y su papel en el control de plagas es de gran importancia. Debemos valorar y proteger a esta especie, y recordar que su existencia es un tesoro natural que debemos preservar para las generaciones futuras.



● CURIOSIDADES
Una característica sorprendente del Dragón Común o Tarentola mauritanica es su habilidad para trepar por paredes verticales de todo tipo de materiales. Esta habilidad se debe a un fenómeno conocido como el principio de las fuerzas de Van der Waals. Aunque muchas personas creen que la Tarentola mauritanica puede trepar por las paredes debido a ventosas en sus dedos, en realidad, este reptil utiliza las interacciones atractivas o repulsivas entre moléculas distintas para adherirse a las superficies.
Sus dedos tienen láminas escamosas que también le ayudan en esta tarea, pero no tienen ventosas. Esta es una adaptación increíble que le permite acceder a lugares que serían inaccesibles para muchos otros animales.

Otra característica sorprendente del Tarentola mauritanica es su capacidad para cambiar de color. Este cambio de color no está asociado con la termorregulación, sino que se utiliza como una característica antidepredatoria y de camuflaje. Además, suelen tener una coloración oscura durante el día y clara durante la noche.

También es conocido como “Lagarto de la Luna” debido a sus hábitos nocturnos. Durante el día, puede salir a tomar el sol para regular su temperatura. Su dieta se basa principalmente en insectos y arañas, que caza cerca de zonas iluminadas. La temporada de apareamiento ocurre entre marzo y julio, y la hembra deposita 1-2 huevos por nidada.



● LEYENDA
En la mística isla de Ibiza, una antigua leyenda ha sido transmitida de generación en generación. Esta leyenda habla de un tiempo en que un gran dragón, temido por todos, habitaba las montañas de la isla. Se decía que este dragón tenía el poder de controlar el clima, causando grandes tormentas que asolaban la isla.

Los habitantes de la isla vivían aterrorizados por el dragón y su poder. Sin embargo, un día, un valiente guerrero decidió enfrentarse al dragón para liberar a su pueblo del miedo. Este guerrero, armado con una espada de plata forjada por los mejores herreros de la isla, subió a la montaña para desafiar al dragón.

La batalla fue larga y dura. El guerrero y el dragón lucharon durante días y noches, hasta que finalmente, el guerrero logró herir al dragón. En su agonía, el dragón se encogió hasta convertirse en un pequeño lagarto: la Tarentola mauritanica.

Desde aquel día, se dice que cada Tarentola mauritanica en la isla de Ibiza es un descendiente de aquel gran dragón. Aunque han perdido su tamaño y su poder para controlar el clima, aún conservan la valentía y el espíritu de lucha de su antepasado.

Los habitantes de Ibiza consideran al Tarentola mauritanica, el dragón o salamanquesa, un símbolo de valentía y resistencia. A pesar de su pequeño tamaño, estos lagartos son respetados y admirados por su coraje y su capacidad para sobrevivir en condiciones adversas.

Esta leyenda es un recordatorio de la rica historia y cultura de Ibiza, y de cómo incluso los animales más pequeños pueden tener un gran impacto en la vida de las personas. La próxima vez que veas a una Tarentola mauritanica en Ibiza, recuerda la leyenda del gran dragón y el valiente guerrero, y la importancia de la valentía y la resistencia en la cara de la adversidad.
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